Un servidor de nombres de dominio o DNS se encarga de traducir direcciones IP a nombres fáciles de recordar. Cada proveedor de Internet o ISP tiene sus propios DNS, con los que pueden conocer tu actividad en la Red, e incluso pueden bloquear sitios web.

Sin embargo, puedes cambiar los DNS de tu ISP por otros alternativos. Para ello, habrá que entrar en la configuración de TCP/IP. En Windows, ejecutar ncpa.cpl desde el menú Inicio o la barra de tareas, clic secundario en tu conexión, ir a Propiedades y elegir Protocolo de Internet versión 4 (TCP/IPv4). En la ventana que aparece podrás poner los DNS preferido y alternativo, a elegir entre estos: