“Uno más de la familia”, así se anunciaba en España el Amstrad CPC a mediados de los 80. En efecto, era un ordenador pensado para el hogar, aunque en la práctica, al igual que el ZX Spectrum, fue muy apreciado por los jugones. En el anuncio aparecen dos modelos, el 464, con unidad de casete y 64 KB de RAM, y el 6128, con unidad de disquete y 128 KB, ambos con procesador Zilog Z80A, sistema operativo CP/M, BASIC y monitor en color o de fósforo verde. Todo un regalo de Reyes en aquella época…

A principios de los 90 se lanzó la gama CPC+, que incorporaba una ranura para cartuchos de juegos y mejoras en los gráficos, pero no tuvo tanto éxito como los CPC originales…